EL PODER DE LA BENDICIÓN

EL PODER DE LA BENDICIÓN

…No toques a mis ungidos… Salmo 105:15

Eres el ungido de Dios. Cuando la gente viene contra ti, también viene contra el Dios que te bendijo. La buena noticia es que no tienes que pelear esas batallas. No intentes hacerlo con tus propias fuerzas. Tienes un defensor. Quédate quieto y mira la liberación del Señor. Las personas y las circunstancias con las que te enfrentas pueden parecer más grandes y poderosas, pero permanece en paz. La bendición sobre ti es mayor que lo que está tratando de detenerte.

La Escritura dice que lo que Dios ha bendecido, ningún hombre puede maldecir. La bendición sobre ti es más poderosa que cualquier traición, que cualquier palabra negativa pronunciada sobre ti, que las personas que intentan desacreditarte. Nadie puede quitarte esa bendición. Eso significa que eres bendecido sin importar lo que digan las personas o las circunstancias. Aquí está la clave: la bendición no vino de las personas, por lo que no puede ser quitada por las personas.

Una oración para hoy

Padre, gracias por la unción que has puesto en mi vida. Gracias porque nadie puede quitarme esa bendición, y es más grande que lo que sea que intente detenerme. Creo que la bendición me llevará más lejos de lo que imaginé. En el nombre de Jesús, amén.

Guillermo Pacheco